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Su cuerpo estaba en perfecto estado, sus tejidos corporales denotaban detalles de una piel intacta, su pelo, su ropaje, todo estaba perfectamente conservado. (Ver más...)
 
 
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MONOGRÁFICO
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RAUL SALINAS VAZQUEZ
LA OTRA VERSIÓN DEL CASO DEL CABO VALDES.

III
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El día 16 de Junio de 1999 por fin Armando Valdés Garrido, más conocido como "el cabo Valdés" dio su visión de los hechos ocurrido en la Pampa de Lluscuma en un ya lejano 25 de Abril de 1977 cuando se encontraba en unas caballerizas acompañado de siete soldados realizando labores propias del Ejército.
Sus declaraciones efectuadas a la Televisión Nacional de Chile, en el programa del periodista Pedro Carcuro, llamado de Pé a Pá, causaron una gran expectación entre la comunidad ufológica del país andino, aunque no se puede obviar ciertos matices de marketing comercial en su disertación lo que nos hace pensar que detrás de todo este caso aún existen detalles por dilucidar.
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Hasta ahora todas las declaraciones sobre este caso eran unilaterales. Todas ellas, provenían de las pocas veces que Armando Valdés habló con la prensa y algún periodista especializado sobre el tema. Pero, uno de sus subordinados Raúl Salinas Vázquez, quiso dar su versión propia de los hechos, ya que dice estar en desacuerdo en ciertas apreciaciones de su jefe militar de aquellos años.

Aunque esto no es nuevo en la ufología de tener diferentes apreciaciones sobre una misma observación en los testimonios de las personas afectadas, tampoco se debe dejar de decir que detrás de todas estas actitudes personales, existen unos intereses económicos donde juegan protagonismos y otras vertientes aún sin determinar, pero que seguramente con el tiempo irán aflorando.
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Lo cierto es que el Cabo Valdés, ha dejado el Ejército de Chile y su presentación antes las cámaras de la TV nos ofrecieron todo un aviso propagandístico sobre su próximo libro. Obra eternamente anunciada, y que seguramente nos hablara de las desgracias con que nos encontraremos al principio de este nuevo Milenio y las correspondientes profecías apocalípticas. Todo esto, por deducción lógica de las conocidas inclinaciones místicas y religiosos donde se encuentra involucrado el Cabo Valdés actualmente.

Valdés además agregó en sus declaraciones ante la pantalla, que a pesar de saber que tenía "una inteligencia" delante de él, aquella noche en Lluscuma también tuvo la percepción de que esos seres no eran buenos. También menciono haber recibido en dos oportunidades visitas de "hombres de negros", y que estas entidades le habían hablado de un signo muy especial, al cual el siempre sintió especial curiosidad, nos referimos a la letra H, adquiriendo sus declaraciones gran controversia y unos pormenores insospechados que han dado mucho que hablar y sobretodo de estudiar a futuro.

Dentro de todo este contexto, Raúl Salinas Vázquez, subordinado del Cabo Valdés en aquellos años, también nos quiso dar su versión y es así como la ofrecemos.
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QUIÉN ES RAUL SALINAS VAZQUEZ?
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En el año 1974, este joven chileno, como tantos otros acudieron al llamado del Servicio Militar Obligatorio que existe en Chile. Fue destinado a la Escuela de Caballería de Quillota donde prontamente lo destinaron al Norte de Chile, para ser exacto en la I Región, a la localidad de Putre. Es en este lugar donde el destino lo llevaría a participar de este extraño caso que ocurrió en pleno desierto y donde hasta hoy el único protagonista haya sido Armando Valdés Garrido.

Hoy en día Salinas tiene 47 años. En el año 1999 estaba en paro, separado hace unos meses y vivía normalmente con su madre y algún sobrino en la populosa Villa San José en la comuna de San Miguel.

Quién esto escribe, tomo contacto con este testigo excepcional del famoso caso del Cabo Valdés, cuando fue invitado la noche del 9 de Agosto de 1999 al programa "Saludando la Noche" del prestigioso periodista Patricio Varela, que se emite en Radio Nacional de Chile para todo el territorio nacional chileno. Compartieron mesa el doctor psiquiatra Mario Dussuel y quien escribe. El programa se hizo corto ante las preguntas formuladas por los comensales, frente nuestro había un Raúl Salinas escueto y corto de palabras, pero que notaba una predisposición total a contestar lo que fuera. Este programa sirvió como enlace para poder entrevistarme a solas durante varias horas con Raúl Salinas, quien se mostró siempre dispuesto a colaborar ampliamente.

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Efectivamente, el día 16 de Septiembre se llevó a cabo un encuentro a solas de Raúl Salinas con este corresponsal con el único compromiso de hablar claro y no dejar ninguna pregunta sin respuesta. Debo decir que el testigo cumplió ampliamente su palabra, y a pasar que en muchos pasajes de nuestra conversación fueron duros y busque los matices económicos que podrían mover a este testimonio, Salinas no me eludió el tema y creo haber captado una honestidad digna de elogio en sus declaraciones.

VERSION DE RAUL SALINAS DE LOS HECHOS DEL 25 DE ABRIL DE 1977

Siempre basándose en las declaraciones casi textualmente de Raúl Salinas, este dice haberse ofrecido para la primera ronda de vigilancia. Comienza sus recuerdos con un extraño pájaro que denomina un búho quien lo estaba molestando continuamente momentos antes que el Cabo Valdés lo llamará a tomarse un café caliente para aminorar el frío de la noche. Curiosamente dice haber tenido un pensamiento en aquellos momentos como de "que algo malo va a pasar" (lo que demuestra quizás un aspecto supersticioso del testigo) al relacionar el búho con un mal presentimiento.

Salinas recuerda que fue Juan Reyes, otro conscripto, quien aviso gritando al Cabo Valdés… Mi Cabo, un Ovni... mire mi Cabo un ovni…. (según Valdés fue el soldado Rosales quien le dió el aviso)

Lo observado por Salinas es lo mismo que Valdés…una estrella que cae, la cual adquiere volumen como un cometa, y va dejando chispas de fuego en su caída y que cae en unos cerros cercanos que están situados a unos 3 kilómetros de distancia.
El silencio es total entre los animales y Salinas dice haber sentido un escalofrió cuando volvió a mirar el cerro ya que las luces de colores verdes y amarillo se acercaban deslizándose por la loma del cerro. Luego advirtió una gran neblina, casi a 500 metros de donde ellos estaban, la neblina se detuvo (luego que el Cabo Valdés diera la orden de tapar la fogata que tenía la tropa para calentarse) Es en esos momentos cuando Salinas dice ver salir de la neblina una gran nave, de aspecto totalmente sólida, con una dimensión comparable al Estadio Nacional de Chile y logra advertir algunas extrañas sombras que se desplazaban en su inteior. La nave emitía unos bellos colores y Salinas advierte que su cuerpo esta pegado como con cemento al suelo, le cuesta mucho moverse y nota a su alrededor mucho pánico. Según Salinas, el Cabo Valdés dio la orden de colocarse "hombro con hombro" a todos sus hombres, y mientras algunos lloraban y otros rezaban miraban con gran temor lo que tenían delante de ellos.

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En este punto hay que mencionar ante la pregunta de quien escribe ¿Porqué no utilizaron las armas de reglamento? La respuesta de Salinas fue tajante al respecto: NO TENIAMOS NINGUN TIPO DE ARMAS y al ser consultado por algún aparato de radio para comunicarse con sus bases militares en Putre, contestó que tampoco tenían ningún aparato de comunicación, lo cual hace más extraño este caso, ya que la zona donde estaban estos militares es de gran vigilancia fronteriza, ya que son tierras limítrofes con Perú y Bolivia y sea por contrabando o por asuntos de estrategia militar resulta muy extraño que no hubieran armas en la patrulla.

Según la investigación de el periodista Patricio Abusleme, "sí llevaban armas y estas eran entre uno y tres fusiles del tipo SIG", incluso añade, un conscripto hizo el intento de disparar al aire, pero su fusil se trabó. ¿Porqué razón siguen diciendo, tanto Valdés como Salinas que no tenían armas? ¿Qué hay detrás de esta discrepancia?¿Un secreto militar? La zona no es para estar desarmados, según los detalles explicados en el párrafo anterior.

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Siempre según Salinas, a eso de las 3,00 de la madrugada ocurrieron varios hechos inexplicables que con el tiempo los ha interpretado con más certeza. El miedo existente en los militares desapareció extrañamente y la temperatura subió a un grado tal que de estar abrigados para noches bajo cero de temperatura se vieron de pronto vistiendo solo sus camisetas militares, en esos momentos Salinas dice haber pensado: "Hasta aquí llegó mi vida". A continuación entra en la tropa una relajación total y Salinas recuerda verlos a todos con sus cabezas entre las piernas dormitando; él esta a unos dos o tres metros del grupo en una esquina de la cuadra de caballos y logra distinguir al Cabo Valdés arriba de una pirca (pared de adobe) de unos cuatro metros de altura. El también siente sueño y cae en un sopor viendo a la nave que emitía luces como rayos. Sus recuerdos le traen a ir viajando por un túnel lleno de luz con sombras a su alrededor.

A unos 15 minutos de lo descrito anteriormente Salinas dice que despertaron todos los de la patrulla y en ese momento se dieron cuenta que el Cabo Valdés no estaba entre ellos. Deciden salir a buscarlo rápidamente, se aproximan a la pirca y sienten ruidos al otro lado del muro, cuando se aprontan a bordear el muro una especie de muñeco sale de tras del muro y cae a unos pocos metros de ellos. El muñeco es el cuerpo del Cabo Valdés, dada la forma que cae (de lado) "es casi un milagro que no se quebrara un hueso" añade Salinas, y es en esos momentos cuando Valdés con una risa casi siniestra pregunta por su madre casi al borde de la desesperación, además emite la frase "Ustedes jamás sabrán quienes somos ni de dónde venimos". A continuación aprecian a Valdés con una tupida barba, lo cual Salinas lo encuentra inmediatamente extraño, ya que ha sido él mismo quien preparó todos los utensilios para que el Cabo se afeitara, pues es tradición del Ejército que la milicia vaya impecable en su presentación, y el Cabo recuerda perfectamente que Valdés cumplió con este requisito.

Salinas recuerda que el Cabo Valdés llama desesperadamente a su madre y es tal su insistencia que un conscripto le golpeo fuertemente para que volviera a la realidad. Valdés queda bastante K.O. por esta acción de su subordinado, pero al parecer fue efectiva en ese momento tan especial. También recuerda una pregunta del cabo Valdés cuando vuelve a la realidad ¿Vieron lo que yo vi?

Salinas dice haberse mantenido un poco apartado del grupo, como por instinto de resguardarse su espalda, o quizás para tener más visión de los hechos. Es aquí cuando Raúl Salinas incorpora una visión totalmente forteana a su relato y que dejó bastante descolocado a algunos investigadores, incluido quien escribe, lógicamente.

Raúl Salinas dice que en esos momentos en la parte extrema de la pirca, divisa un ser muy extraño. Lo describe como mitad humano y de la cintura para abajo, aspecto animal. No describe su cara, ya que dice no haberla visto pues que tenía una especie de casco que le cubría su cabeza. Si diviso en su cintura un objeto, transparente, que emitía luces y que le pareció una arma
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Esta observación de Salinas, toma unas dimensiones ya totalmente fuera de los acontecimientos que ocurrieron en Putre, pues hasta allí llegan sus recuerdos más vivos con respectos a los acontecimientos de aquella madrugada tan agitada entre sus compañeros de Ejército.

En nuestra conversación menciona que no supo más del asunto pues bajaron a Putre. Al día siguiente, menciona recordar que se habla de un metal encontrado en el lugar de los hechos, lo cual para él es falso y no recuerda nada al respecto. No sabe nada del reloj, objeto de tanta controversia. Dice que eran ocho los componentes de la patrulla en Lluscuma.

Llama la atención algunos pequeños detalles. Por ejemplo, Valdés relata una nave posada en tierra, independiente de la nave de la neblina ¿Hubo dos naves en Lluscuma? Salinas nunca menciona esto último. Existen unas claras imprecisiones, que pueden explicarse dentro del caos del momento y la excitación nerviosa de los componentes de la patrulla. Un acontecimiento crucial, es el del reloj que de alguna manera demostraría un traslado o desplazamiento en el tiempo. Este hecho no es identificado por Salinas, o no lo recuerda como algo especial. Esto indica que de alguna forma este asunto puede haber sido añadido, pues en Putre cuando la situación era otra y los rumores ya comenzaban a correr irremediablemente... El famoso reloj ha traído de cabeza a muchos investigadores. Se ha dicho de todo, desde que nunca se quiso mostrar para evitar promocionar su marca comercialmente, hasta que jamás existió. Pero dejaremos este asunto para más adelante, cuando analicemos este detalle más concretamente.

Cómo conclusión de esta tercera entrega se puede decir que nuestro interrogado Raúl Salinas, aporta algunos detalles curiosos y que le dan unas dimensiones totalmente diferentes al caso del cabo Valdés. Más aún, cuando al terminar nuestra larga charla en el despacho del Doctor Dussuel, me pareció un tipo sincero, aunque nunca perdiendo la perspectiva por nuestra parte, que detrás de este asunto existe un alto porcentaje de competencia oculta entre estas dos personas. Nos referimos a Armando Valdés Garrido y su subalterno en aquel año 1977, Raúl Salinas Vázquez.


RAÚL SALINAS Y SUS AMISTADES EXTRATERRESTRES

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Por de pronto, Salinas Vázquez nos aporta una fantástica versión de su vida a los años de ocurridos los hechos, donde se nota claramente que en todo este tiempo transcurrido, ha sufrido una verdadera intoxicación de matices relacionados con la ufología, ya sea por iniciativa propia, como de la incuestionable participación de otros personajes de Chile, que le han estructurado una historia en su mente y que él ha ido adaptando como mejor ha podido. Suponemos que todo esto, con el único fin de enfrentar este desplazamiento mediático que ha tenido de parte del cabo Valdés.

Pero vamos a los hechos y seguiremos con Raúl Salinas Vázquez:

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Cabe señalar que es difícil hablar sobre una persona que a primera vista te resulta simpático, humilde y el prototipo del chileno sacrificado en este nuevo Chile, estructurado sobre una salvaje economía de mercado, ultra-capitalista, donde todas las personas van corriendo y no existe mucho tiempo para ciertas cosas del espíritu.

Repito que, Salinas me pareció honesto y un sacrificado chileno más en la lucha por buscarse la vida. Esto no impide que personalmente haya captado ciertas angustias internas en este personaje, y también ciertas frustraciones que trata por todos los medios de encajar en una historia diferente a la del cabo Valdés, y que solo el tiempo sabrá si esto le rendirá fruto.

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En nuestra larga conversación, en el despacho del Doctor Mario Dussuel, psiquiatra chileno, y que es uno de los pocos profesionales que trata este tipo de personas que provienen del tema Ovni, Salinas mostraba insistentemente un grueso cuaderno donde se podía apreciar una serie de mensajes provenientes - siempre según Salinas - de personas que estaban en contacto mental con él desde hace un tiempo. La psicografía entraba en acción. Método de escritura automática empleado para contacto con entidades supuestamente extraterrestres y otras entidades etéreas, que es usado por muchas personas que buscan este puente de comunicación. Luego sabríamos de donde cogió todos estos elementos Raúl Salinas, ya que este era solo uno de los matices que adquirió en su ambular mundano, entre personas que dicen tener contacto con entidades superiores, creyentes fanatizados de los Ovnis y más de algún "ufólogo" despreocupado que colaboró en este contagio. Si le agregamos los años que han pasado desde los acontecimientos ocurridos en Pampa de Lluscuma, el lector podrá formarse una idea en que situación esta la mente de esta persona respecto a la deducción crítica y racional de sus interpretaciones hoy en día.
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Entre estos personajes que dicen contactar con Salinas, existe uno que se destaca por sobre todos los otros. Su nombre es Amalia y generalmente su presencia se hace efectiva entre las 0,3 y 0,6 de la madrugada. Su descripción es la de una atractiva persona de sexo femenino, incluso se podría describir como sensual y bonitos rasgos. Físico agraciado, y se distingue sobre su pecho izquierdo una letra H en relieve ¿Otro elemento añadir a su contagio?

Según avanzaba nuestra conversación, no pude menos que apreciar un entusiasmo embriagador que al parecer causa este personaje en Raúl Salinas, ya que ha ido adquiriendo un verdadero protagonismo en su vida. Su relato adquiere características realmente fantástica y de entusiasmo cuando habla sobre Amalia. Este sensual personaje, lo ha llevado en una nave de nuevo a Putre, donde le hizo dibujar una letra H en el suelo, y añade Salinas enfáticamente, que logró distinguir debajo de la nave la ya famosa letra H con los extremos de color rojo relucientes.

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En este punto de la conversación, la pregunta lógica era si este personaje femenino era real o es solo un producto de la imaginación de Salinas. A esta consulta directa, Salinas respondió que esta presencia siempre le ha ocurrido cuando esta durmiendo, pero él esta convencido de que la presencia de Amalia es totalmente real. Además agrega que Amalia no se presenta sin avisar, sino que viene cuando él realmente la necesita o piensa en ella. En este punto, advierto una interpretación onírica llevada a la realidad extrema, pero sólo es una opinión más dentro de lo que estamos tratando de encontrar en este episodio
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Salinas, agrega haber viajado a muchos lugares con esta amiga, la cual le ha mostrado una infinidad de mundos diferentes, y ha tenido la oportunidad de ver muchas naves voladoras iguales a las que se usan ellos dos. Más aún, dice que los seres que van dentro de estas naves son de varios tipos, y que ha logrado observar de cerca aquellos que vio la noche del 25 de Abril de 1977 en Pampa de Lluscuma, aludiendo a los que describió anteriormente como de mitad humano y la mitad animal.

Consultado de inmediato en relación con estos increíbles seres, Salinas nos expresa, que los ha visto dentro de las naves sin el casco, y su descripción es de que poseen un rostro agradable, pelo corto, rubios, ojos verdes, estatura de unos 1,70 metros, y sólo le inquietaba mirarlo debajo de su cintura, pues la parte inferior del cuerpo era semejante a la de los canguros terrestres

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En este párrafo debo añadir algunos detalles que menciona Salinas. Dice tener estas visitas de los 21 años. Añade tener dos marcas en su cuerpo, una detrás de su cuello y otra en uno de sus antebrazos. Agrega que no tenía idea del tema Ovni cuando se desplazó a cumplir con su servicio Militar Obligatorio al Norte de Chile. Consultado sobre la letra H y como adquirió su conocimiento, dice que Amalia le hablo de esta letra y también de la palabra ummita, aunque concreta que él tenía una curiosa inclinación por esta letra desde los 21 años aproximadamente. Luego a lo largo de la conversación sale a luz un profesor de una universidad chilena, quien realiza una interpretación de las palabras de Amalia y sometió a Salinas a un intensivo tratamiento de músico-terapia. Salinas menciona que "gracias a esta persona sabe mucho más cosas sobre lo que le dice Amalia". Luego hablaremos de este curioso profesor universitario, él cual se merece un apartado aparte y donde se conjugan una serie de factores que dan cátedra como un ser humano culto e instruido no esta exento de dar pasos en falsos, más aún, cuando no se dispone de la información necesaria en este otro lado del mundo en referencia al controvertido tema UMMO.
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La impresión lograda de las palabras del interrogado, respecto a este personaje femenino, es que Salinas cree totalmente en la existencia de Amalia, y en la protección que esta le brinda. Hay que mencionar que en una parte de la conversación y siempre en relación con Amalia, Salinas se expresa de la siguiente manera (textual):

"Amalia me esta apurando cada día más a que abandone este mundo"

Salinas, insiste en que le queda poco tiempo en este mundo, ya que había hecho un juramento con este ser femenino y que estaba dispuesto a entregarse a ellos, pues se siente muy bien junto a estos. Se nota una verdadera admiración y casi adoración hacia Amalia, y la describe como una verdadera reina quien le muestra mundos diferentes

Si nos detenemos un momento, luego de toda esta reseña de datos casi de ciencia-ficción que nos ofrece el subalterno del Cabo Valdés, creemos que debemos reflexionar un tiempo, tomar aire, y eso es lo que ha realizado este humilde investigador, el cual sacó sus conclusiones luego de un par de meses de esta conversación con Raúl Salinas.

No puedo negar que al término de la conversación con el amigo Salinas, no sabía la formula adecuada para continuar este interrogatorio. Quizás optando por las pautas ordinarias de cuando nos enfrentamos a un testigo del FOVNI, o simplemente hablarle en forma diferente, personal, fuera de convencionalismo, con el corazón en la mano. Yo pensaba que mi "tocayo" Raúl, estaba en una encrucijada difícil de digerir, y que podría desequilibrar su mente, y por que no decirlo también su vida completa. Por experiencia, acostumbro a no dar consejos cuando estoy metido en una investigación, pero algo me decía que esta vez tenía que hablar de otra forma con este sujeto.

En mi mente pasaban los episodios de la ciudad catalana de Terrassa (Barcelona) donde los amigos Juan Turu Valles y José Félix Rodríguez Montero aparecieron decapitados en la vía del tren en el apeadero de Torrebonica de dicha localidad. Estos hechos ocurrieron el 19 de Junio de 1972. Una nota se encontró en uno de los bolsillos de los suicidas, decía escuetamente. "Los extraterrestres nos llaman" aparecían las siglas W.K.T.S. y dos símbolos de infinito.

También la Orden del Templo Solar instaurada en el año 1984 en Canarias y que su líder Luc Juret, se había suicidado en Suiza y otros adeptos a su secta en Québec (Canadá)

Mi mente también recordó, que en Marzo de 1997, al alucinado Marshall Applewhite líder de la secta Heaven's Gate, en una lujosa mansión de San Diego en California no se le ocurrió otra cosa que su espíritu, y el de varios de sus seguidores viajaría hasta un supuesto Ovni que iba escondido tras el cometa Hale Bopp. ¡En fin, mi mente pensaba todo esto cuando estaba delante de Raúl Salinas Vázquez¡


NOTA FINAL:

A finales de Abril de 2007, ha sido imposible localizar nuevamente a Raúl Salinas con la información que poseemos.
Según fuentes cercanas a esta persona, un cuadro sicótico que se apreciaba a finales de los 90 fue en aumento, confirmando la impresión de nuestra despedida descrita anteriormente.
Sólo esperamos sinceramente que haya encontrado el camino adecuado en su vida.

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